AQUI UNA LINTERNA, POR FAVOR

Después de leer los comentarios a mi último mensaje creo que debo iluminar algunos puntos.
Si bien es verdad que los artistas podemos tener dias buenos y/o malos como todas las personas, no es una prerrogativa que yo reclame para mi. Y esto no se si me juega en contra o a favor. Lo que menos quiero es defenderme, pero el caso es que yo soy así SIEMPRE. Y cuando digo que "allí hay un ser humano con penas, esperanzas, etc", al que tengo la obligación humana de considerar como tal, no hablo de la simpatía, esa cualidad que pocas veces es real y legítima y que, para mi, no se traduce en colgarme una sonrisa y sacarme todas las fotos que me pidan y firmar todos los autógrafos que me sean requeridos por la sencilla razón de que yo pienso que lo mejor que puedo darle a los otros es mi TRABAJO en el teatro y mi PENSAMIENTO en el libro Y NO CREO QUE UNA FIRMA EN UNA SERVILLETA O EN UNA HOJA DE PAPEL PRESTADA CON APURO SEA BUENO PARA NADIE.
Estoy en contra del endiosamiento que produce la TV que eleva a categorías altísimas a seres que, usualmente no tienen nada que ofrecer mas que el egocentrismo y cuya principal aspiración es SALIR EN LA TELE y allí se acaba todo. No hace falta mencionar ejemplos.
En el libro cuento una ceremonia que realizo todas las noches antes de salir a escena:
Me pongo detrás del escenario cuando el público ya está en sus butacas y pienso profundamente y con conciencia todo el esfuerzo humano que requirió esas presencias, toda la voluntad, todo el dinero que hizo falta para provocar ese maravilloso murmullo que escucho antes de salir, y me preparo para darles lo mejor de mi. Y agradezco. Y no me permito tontear durante la función. Y si un solo espectador se enriqueció con una emoción que pude provocarle, me doy por cumplida. Después de eso, lo reconozco, me gustaría tener otra puerta de salida, solitaria y anónima. Lo mejor de mi fue dado desde el escenario o en un ámbito como este que valoro enormemente y me emociona cada vez. Siento que puedo ser útil, siento que si para eso soy famosa, bienvenido sea y otra vez, agradezco a mi destino el haberme conducido hasta aqui.
Para terminar: Sol, si no firmé tu libro no tengo excusas, pido disculpas y prometo reparar cuando me pongas el libro delante de la nariz y me digas: "Tonta, soy Sol, firmame".
Erika: si me mandás una dirección te mando el libro. Y respecto de Nacha no me extraña, es una de las pocas actrices argentinas que tiene un pensamiento mas allá de sus personajes. Yo la valoro mucho. Ella tampoco es simpática en el sentido que estuvimos hablando acá. Es rigurosa trabajando y muy disciplinada.

Espero que haya quedado un poco más claro el tema. Podemos seguir hablando todo lo que haga falta. Este espacio es nuestro.
Abrazo cálido y sincero a todos.
Leonor
Gracias Ceci por tus palabras.
Esto, este encuentro, este lugar, vale la pena