domingo, 27 de marzo de 2011

A BUEN FIN MEJOR PRINCIPIO

Hoy termina brujas. No puedo evitarlo: celebro los finales. Creo firmemente que hay algo que me espera. Algo nuevo, excitante, mejor. Optimismo? no creo, simplemente veo y siento en mi cabeza y en mi corazón la belleza de los cambios. Mi vida ya es lo suficientemente larga como para tener la comprobación de que siempre, pero siempre, el flujo del devenir renueva las cosas. Y acepto que a veces el cimbronazo de un final, de lo que sea, un trabajo, una relación, produce miedo, sufrimiento, incertidumbre.

Y es a eso a lo que hay que dar la bienvenida. Al pánico a caminar en arenas movedizas pero seguir caminando.

Estuve en el desierto una vez, en el Sahara, y pocos lugares hay menos desiertos que el desierto. Solo hay que saber mirar. Infinidad de pequeños insectos lo habitan, y cristales, y de vez en cuando un manantial que no siempre es espejismo. Y humanos, diferentes, raros para nosotros, con diferentes necesidades y diferentes pensamientos, con los que no hay más remedio que comunicarse porque se anhela un aliento humano en medio de la soledad.

La urbe puede convertirse en cualquier momento en el desierto y así sentirnos: desamparados, solos, indefensos. Nunca lo estamos. Cambiemos el foco de nuestra mirada y estarán, allí donde miremos, personas y cosas diferentes. Lo que debemos cambiar es nuestra sintonía. Quiero decir que no busquemos lo mismo que hemos perdido o lo mismo que se ha terminado. Está lo nuevo. Total, con probar nada se pierde.

Vale la pena.

Ustedes y yo sabremos que será lo nuevo que llegue a mi vida en materia laboral. Aquello a lo que me dedicare a partir de ahora. Yo todavía no lo sé.
Solo sé que no lamentaré, como nunca lo he hecho, el final de nada.
Los nuevos comienzos me apasionan.

Los abrazo.

Leonor.

jueves, 17 de marzo de 2011

EVENTO EN CORDOBA - ARGENTINA

Exito rotundo.

Más de 2000 personas pudieron disfutar de un evento increíble el 15 de marzo. Leonor Benedetto, Carolina Papaleo, Bernardo Stamateas y Vanesa Duran brillaron en el escenario. Fotografía: Damián Egidio



domingo, 13 de marzo de 2011

LA VERDULERA QUE VENDE JOYAS



Conocí a Vanesa Duran mientras grababa "Rosa, Violeta y Celeste" para Canal 7.

Ella es uno de los mejores ejemplos que conozco de como construir una persona exitosa y feliz cuando todo, absolutamente todo el afuera indica que ese no será su destino.

Vendía lechuga y coliflores en la verdulería de su padre en su Córdoba natal. Hoy es una de las empresarias mas importantes del país con una reventa puerta a puerta de joyas, con veinte mil vendedores a su cargo.

Nos caímos muy bien y nos hicimos amigas. Con esa clase de amistad hecha, no de la frecuencia del trato, pero si de la generosidad y solidaridad de la una para con la otra cuando ésta es requerida. Puso sus joyas para el programa de TV, asistí a uno de los encuentros que realiza anualmente para sus empleados, que son, literalmente, fiestas. Mandó regalos para la presentación de "Que haces para estar así" para todos los presentes. Y me ha pedido ahora que esté presente en Córdoba para uno de los festejos que realiza su fundación con motivo del Día de la Mujer. Y allí estaré. El martes a las 19 hs. en el espacio Quality de la ciudad de Córdoba nos reuniremos con Bernardo Stamateas para tener una charla sobre los temas que nos interesan, y con Vanesa, por supuesto. La entrada es libre y gratuita. Si alguno quiere asistir podremos vernos y me dará mucho gusto.

Los abrazo.

Leonor.

miércoles, 9 de marzo de 2011

POR PEDIDO DEL RESPETABLE PUBLICO

Así dicen los cantantes de tangos, no? Y luego cantan algo que nadie había pedido.
No es el caso. Ustedes lo pidieron y es una información: Brujas termina el 27 de marzo.

Los abrazo
Leonor

sábado, 5 de marzo de 2011

LO MEJOR DE LA VIDA

Me ha pasado, de hecho me pasa con frecuencia, mirar ciertas vidas y sentir que son mejor que la mía. Más fáciles, con más amor, con más dinero, con más reconocimiento, con más amigos verdaderos, con menos exigencias, menos esfuerzo.

Muchas noches volviendo del teatro, miro las ventanas iluminadas y me imagino gente feliz detrás de los cristales. Personas que comen comidas sencillas, que se aman sencillamente, que se cuentan como fue su día. Tal vez no ocurre nada de eso y esas mismas personas de mi imaginación están frustradas, resentidas y profundamente infelices. Pero no puedo evitarlo: yo me imagino a la gente feliz.

Entonces decido repasar mi agenda emocional y mental de los últimos días:

Grabé escenas de "Herederos..." con las que no estaba muy de acuerdo y pude, casi en el momento, decidir que sería la mejor escena de mi vida, que transformaría cada palabra en el disparador de una emoción, sin importarme el contexto. Provocar emociones es algo que me sale bastante fácilmente. Recurriría a esa capacidad para lograr revertir mi posible disenso con el texto.

Tuve la noticia de la finalización de "Brujas", intempestivamente y sin aviso. Moria Casan decidió no seguir con este trabajo. Le otorgo su derecho y el sabor agridulce dura muy poco. Horas después ya acepto lo que trae la vida y me aplico lo que predico: cosas buenas vienen cuando algo termina.

Comento con un amigo mi intención de fundar una escuela de "Arte y vida". Lo hago al pasar y a los pocos días me presenta a un amigo suyo que se suma con entusiasmo y que tiene los medios intelectuales y económicos para hacerlo.

Saco fotos para una producción de la revista "Hola". Pido a determinados fotógrafos, siempre lo hago, y resulta que están ocupadísimos y me proponen a una fotógrafa colombiana que no conozco, y que resulta de un talento sorprendente y una persona alegre y generosa.

Nunca me había fotografiado una mujer y la experiencia resulta fascinante y enriquecedora. Se llama María de Jesús Álvarez.

La dirección del Multiteatro decide hacer función el lunes, justo cuando mi vestidora desde hace años ya había planeado unas modestas vacaciones de dos días por el feriado. Decido que no las anule de ninguna manera y también decido que un día de arreglármelas sola antes de la función es perfectamente posible y hasta beneficioso para mi. Me explico: el lunes tendré que ser multifuncional y ese es un desafío que jamás desperdicio.

Y llego a la conclusión de que eso es lo mejor de mi vida: el haber llegado a aceptar lo que ocurre y a sacarle provecho. Una parte de mi vida está rigurosamente planeada, con rutinas de disciplina rara vez abandonadas. Pero hay otra parte vacía que espera lo que ocurre, todo eso que no está al alcance de mis decisiones. Lo que pasa, lo inesperado. Todo eso tiene un lugar para que ocurra, y es bienvenido aunque la primera impresión sea de sorpresa o desagrado. Puedo salir rápidamente y mirar el cuadro total y tener las dos posibilidades: o aparece su lado positivo o me quedo en el misterio, en el convencimiento de que pronto será revelada la verdadera intención del "PORQUE ESO RESULTARA BUENO PARA MI VIDA".

Claro que para eso hace falta tiempo vivido y usado para crecer. No se llega allí de un día para el otro. Eso es lo que podemos hacer con el paso del tiempo: o nos convertimos en quejosos y víctimas, o nos detenemos ante cada circunstancia, aunque duela, y sacamos provecho de ella.

Y les aseguro que surge la alegría de estar vivos. Se llega a sentir la verdadera textura de la vida y su disfrute, que incluye el dolor y el sufrimiento claro, pero que no nos toma tan desprevenidos.

Se los deseo. Y los abrazo.

Leonor.

P/D. Para concluir con el tema de la opinión: claro que hay que escuchar las opiniones de los otros. Les cuento lo que hago yo, por si les sirve, y les aseguro que estoy acostumbrada a las opiniones sobre mi persona que emite gente que no tiene la más remota idea de quien soy. Ni bien escucho algo, no solo sobre mi, sobre temas que pueden ser banales o importantes, pienso en la persona que está hablando, en quién es, si me resulta alguien interesante o es un perfecto idiota. Si es inteligente o ignorante. Si es generoso o autoritario. Y entonces decido si escucho y tomo en cuenta lo que dice, o si sencillamente apago mi atención.
Pienso que el tío que provoco la discusión sobre el color de unas uñas pintadas tenía un auditorio familiar muy proclive a discutir y lo hubiera hecho de todas maneras se tocara el tema que se tocara. Y si hacen memoria, no fue esa la primera vez.